domingo, 20 de agosto de 2017

El cuerpo infantil

El Cuerpo Infantil

La historia del arte también se apropió del cuerpo del niño/a convirtiéndolo en sujeto objeto del arte, podríamos hoy decir que a las primeras imágenes sobre pornografía infantil fueron aportadas por el arte, muchas de esas obras se hacían por encargo como pasaba en el Barroco, es el caso de Bartolomé Murillo ( Español), en las que se pueden ver varias de sus obras donde los niños son protagonistas, en muchos de los casos los niños están en posiciones sexualizadas, con hombros descubiertos, comiendo frutas; en el caso de Joaquín Soralla y Bastida (Español) podemos ver a los niños en escenas de playa, desnudos con un algún adulto, como es una de sus obras junto a un religioso; uno de los casos más conocidos en el mundo del arte es de Edgar Degas (Francés) a quien mencione ya en otras oportunidades con sus bailarinas y la relación que mantenía con ellas, su escultura más famosa es un homenaje a una de las bailarinas de 14 años, que se la menciona como su amante.

Mientras tanto dos fotógrafas sufrieron ataques por su obra, ellas fueron Irina Ionesco (Francesa) conocida por las fotos que le tomó a su hija Eva en poses eróticas y Sally Mann (Estadounidense) que fotografiaba a sus dos hijas y su hijo desnudos en las afueras de Virginia; estos ataques o cuestionamientos no se dieron y no se dan en la obra de artista hombres

En la actualidad se pueden ver varios trabajos de artistas comprometidos con la temática del maltrato infantil, seleccione dos Artistas que me parecen por demás descriptivas, Erik Ravelo (Cubano) en su serie “Los Intocables” realizó fotografías con niña/os crucificados en las espaldas de los distintos poderes responsables del maltrato infantil, Carmen Calvo (España) es una de las grandes referentes del arte actual Español, en su última muestra llamada “La mar de música, Una jaula para vivir”, tomo una historia real. el maltrato sufrido por una niña de España, a la que sus padres obligaban a vivir en una jaula, la instalación es de medidas variables, dependiendo el lugar donde la presente, sólo la jaula que está en la entrada de la muestra es la única que no varía.

Mientras el arte ahora denuncia o hace un revisionismo histórico sobre la imagen, la publicidad es quien tomó a la/os niña/os como sujetos objetos de sus campañas sexualizando su imagen en distintas publicidades, vender es el objetivo, revistas como Vogue mostraron en su interior niñas posando como adultas, hace algunos años las llamábamos “Lolitas”, no nos olvidemos de los concursos de belleza donde las niñas desfilan totalmente producidas como pequeñas adultas.

A diario leemos en los medios gráficos, escuchamos en los medios de comunicación casos de abuso infantil, en la gran mayoría de los casos, es un miembro del entorno más cercano de la/el niña/o el primero en ejercer ese acto de violencia, uno de los padres, la/os abuela/os, tía/os, hermana/os, prima/os, amiga/os de la familia, siguen la/os tutores o encargada/os legales de la niña/o, educadores, luego debemos sumar las redes de trata, prostitución y pornografía infantil, tráfico de órganos, las pandillas juveniles que los utilizan para delinquir, en las guerras son la/os más vulnerables, la hipersexualización de la/os niña/os que se hace desde los medios, forman un gran cóctel imparable, es el momento que empecemos a mirar más de cerca el tema.

Las redes sociales hoy juegan uno de los papeles más importantes, un perfil que se muestra como una niña inocente, un/a adolescente que sólo busca ser amiga/o, muchas veces son adultos que intentan captar la atención de la/el niña/o y adolescente, mientras tanto la Iglesia sigue amparando a curas pedófilos a los que se transfiere de un lugar a otro, para que puedan tener “carne fresca y joven”, el poder político que esconde casos de funcionarios relacionados con abuso infantil.

Desde 1985 doy clases de arte en mi estudio, cuando empecé las redes sociales no existían, si existían las redes de pedofilia, recuerdo que solían llamar por teléfono solicitando información del taller y de los alumnos, para supuestas entrevistas para programas de cables, siempre tenía una respuesta, -que debía consultar con los Padres y que volvieran a llamar- nunca lo hacían en la actualidad suelo recibir mínimo seis correos electrónicos por año, de personas que desean entrevistar a la/os niña/os por distintas razones, las respuesta de mi parte sigue siendo la misma, en lo personal, no fotografío a la/os niña/os que asisten al taller, si el trabajo que van desarrollando, es mi manera de proteger su imágen y lo dejo muy en claro con los Padres el primer día de clases; por ese mismo motivo no tengo dentro de mis contactos de las redes sociales a menores de edad y mi comunicación como docente la hago en forma directa con los Padres.

Muchas Artistas Mujeres fueron victimas de abuso infantil, algunas de ellas lo hacen visible desde su obra como denuncia, sigue siendo el arte el que hoy toma la iniciativa para abrir el debate más allá del que generan los medios de comunicación, la obra de arte perdura más tiempo y como decimos “Una imágen vale más que mil palabras”.

Stella Maris Leone Geraci

Artista Feminista, Activista


Día del niño/a

Día del niño/a

Cuando tenía entre 9 y 10 años, para distintos días del niño/a, mi Mamá me regalo dos libros que marcaron mi infancia y el concepto sobre que podía hacer una mujer, o cuales podían ser sus ideales, por suerte mi Mamá nunca me leyó cuentos de hadas y de princesas, con los años descubrí que la autora de los libros que todavía tengo en mi poder era una gran defensora de los derechos de la mujer,.

Los libros "Mujercitas" y "Señoritas" de Louisa M. Alcott fueron llevados al cine (hay dos versiones), hablan de Mujeres que siguen sus destinos, sus anhelos, más allá de los mandatos, yo quería ser Jo, la protagonista (libre, independiente, que viajo a otra ciudad sola para ser escritora), con los años me volví un poco Jo, creo, seguí mis propias reglas.

No se como elogió esos libros para mí, mi Madre, pero si creen que sabía de Feminismo, tampoco lo se, creo que no, si se, que me crío con total independencia, autonomía, hoy decimos "Empoderada" desde muy chica, decidí como sería mi vida.

Stella Maris Leone Geraci
Artista Feminista, Activista


*El texto fue escrito y publicado en Agosto de 2015


sábado, 12 de agosto de 2017

El hijo de la Cholva

El hijo de la Cholva

Cuando leí la carta del profesor de Anahí, recordé algo que pasaba cuando cursaba Quinto Año, en el Comercial 30 de Caba (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), era 1982 y había un rumor a voces, sobre un profesor que tuve ese año.

El Femicidio de Anahí despertó todo tipo de comentarios machistas, acusatorios sobre la víctima desde luego, el más grave es que Anahí era la culpable de la obsesión de ese profesor que escribió la carta (quiero aclarar no se si es culpable o inocente, pero si veo terrible que se haga público el diario íntimo de Anahí, por parte de la Justicia), siempre existieron profesores acosadores, sólo que cuando yo era chica y como se nos había criado, no lo llamábamos acoso, eso formaba parte del “amor romántico” al que debía aspirar toda niña, adolescente, mujer.

Las chicas, las pibas no se obsesionan solas con alguién, es ese alguien que incentiva esa obsesión y les voy a contar algo que recordé que pasaba en ese Quinto Año de 1982, no recuerdo el nombre del profesor (el secundario para mí paso sin pena, ni gloria), si recuerdo el apodo “El hijo de la Cholva” (su mamá era profesora de contabilidad y siempre pedía el libro de Cholvis), de ahí el apodo; el rumor era que él solía seguir a las chicas en su auto e invitarlas a subir a su auto, en la escuela por supuesto era un profesor serio y respetable de unos 30 y algos, padre de familia, como siempre lo son los acosadores, mis compañeras estaban atraídas por él y él lo sabía y jugaba con eso, recuerdo que el debate entre nosotras era “que si las invitaba a subir al coche y si ellas lo hacían, -una compañera y yo le decíamos- que eso estaba mal, eso era pedofilia, él era un hombre grande (porque cuando somos adolescente siempre pensamos que son viejos) y nosotras éramos menor de edad, pero eran los 80 y nada sabíamos de estos temas, alguna vez algunas de nosotras habíamos escuchado hablar de hombres que abusaban de adolescente, eran tiempos en los que de algunos temas no se hablaba.

Es común que escuchemos casos de acoso que se denuncian en las Universidades, pero muy pocas veces se dice cuando pasa en la escuela secundaria, a esa edad todas Nosotras somos más vulnerables, el victimario lo sabe y lo utiliza a su favor, es importante que empoderemos a las niñas y adolescentes para que dejen de ser objetos de sus violencias y puedan defenderse, cuando una niña, una adolescente, una mujer denuncia a un violento no mentimos, como hace creer el patriarcado.

Stella Maris Leone Geraci
Artista Feminista, Activista